Iluminación de Parques

El diseño de los parques, plazas y jardines se hace como norma general pensando en su percepción a la luz del día, pero es también necesario planificar la iluminación de estas zonas exteriores para su utilización en horario nocturno.

Hay que señalar el potencial que tiene la iluminación artificial en estos entornos, sirviendo como herramienta de diseño para crear y acentuar siluetas, establecer planos de iluminación y poner en valor determinados elementos de interés como fuentes, estatuas o arbolado, acentuando su perspectiva y su efecto tridimensional.

Lo primero que debemos pensar a la hora de diseñar la iluminación de un parque es cómo va utilizar el usuario ese parque y que zonas hay que iluminar, identificando las zonas de estancia y zonas de paso, teniendo en cuanta que es conveniente iluminar zonas adyacentes a los caminos para dar seguridad al usuario.

Con todo ello tenemos que considerar los siguientes aspectos a tener en cuenta en la iluminación de parques, plazas y jardines.

  • Iluminación confortable combinado la seguridad del usuario con la comodidad, y facilitando el desplazamiento de las personas.
    Además una buena iluminación constituye un elemento disuasorio contra agresiones, reduciendo también accidentes provocados por tropiezos o simples desniveles o escalones. Con todo esto, debemos facilitar las actividades nocturnas previstas que se vayan a realizar en el parque.
  • Eficiencia y ahorro energético que provoque una inversión económica.
    Además es necesario que el diseño de la instalación esté pensado para evitar la contaminación lumínica, provocando un impacto ambiental mínimo. En este punto se debería tener en cuenta los efectos que la iluminación sobre la vegetación, teniendo en cuenta su sensibilidad a la banda roja del espectro de emisión de las lámparas.
  • Mostrar los elementos de interés que dispone el parque, iluminando su entorno para crear una iluminación coherente en todo el parque.
  • Tipo y estilo de farolas o luminarias a utilizar en cada aplicación (zona de estancia, paseo,…) en función del diseño estético del parque.

Por ejemplo, en cuanto a luminarias Post-top podemos distinguir estilo, clásico ornamental, funcional o residencial y moderno contemporáneo.

Ref. 574-GL
Ref. 576-LED
Ref. 716
Ref. 797

Niveles de iluminación

Referente a los niveles de iluminación debemos tener en cuenta que no es necesario alcanzar niveles de luminosidad con objeto de imitar la luz diurna.

En muchas ocasiones erróneamente se intenta asemejar a estos niveles diurnos instalando una iluminación de gran intensidad, olvidando que la nueva iluminación nocturna puede dar al parque su propia identidad que nada tiene que ver con la luz del día.

Antes de recomendar los distintos niveles de iluminación que consideramos adecuados para las distintas zonas de un parque o jardín, hay que recordar que no todas las zonas tienen el mismo valor estético ni se utilizan para la misma actividad, ni requieren de la misma seguridad por lo tanto es necesario dar importancia a la iluminación en aquellos elementos que queremos destacar, proporcionándoles un nivel luminoso superior a la luminosidad general del jardín.

Empezando por la reglamentación, la única normativa obligatoria existente a nivel nacional es el RD. 1890/2008 –Reglamento de Eficiencia Energética en Instalaciones de Alumbrado Exterior donde se indica en el aparatado 3.4 Alumbrado de Parques y Jardines de la ITC-EA-02, que deben cumplirse los requisitos luminotécnicos definidos para las vía tipo E y por lo tanto corresponden a una clase de alumbrado S1 a S4 y CE1 a CE2.

En la práctica la experiencia nos dice en la iluminación de parques, plazas y jardines los niveles mínimos de 20 lux es el aconsejable las zonas donde circulan personas debiéndose aumentar en los puntos importantes donde haya confluencia con otra tipo de red.

En las zonas de estancia dependerá mucho de la actividad a realizar como pueden ser diferentes deportes o juegos, habrá que subir esa iluminación.

El alumbrado de fondo debería conllevar una iluminación mínima de 5 lux. salvo en los casos en los que existan zonas inmediatas con alto nivel de iluminación como establecimientos comerciales, monumentos con focos potentes, calles muy iluminadas,… en estos casos es necesario suplementar este mínimo recomendado hasta alcanzar una proporción de 1/10 de la intensidad del fondo luminoso.

Iluminación de elementos del parque

Los elementos que componen un campo visual son generalmente tres: Objetos, entorno inmediato y entorno complementario o lejano.

Una relación óptima de las leyes fundamentales de la iluminación es mantener un relación 6:3:1, sin llegar a sobrepasar el 10:3:1.

Con esto se pretende evitar el desagradable efecto del “agujero negro” que se produce cuando se crean en un parque zonas totalmente oscuras, debe por tanto existir una iluminación general suave que afecte a las zonas que sirven de fondo de los elementos de interés.

Si queremos iluminar elementos constituidos por árboles, arbustos, macizos de flores,… requerirán entre 20 y 50 lux. y su iluminación deberá ser unas 10 veces más intensa que la de el fondo. Lógicamente dependerá del tipo de vegetación, evidentemente un oscuro ciprés necesitará mayor nivel de iluminación que otro árbol de hojas más claras y reflectantes.

En cuanto a los elementos esculturales igualmente su iluminación dependerá del material de la escultura. Para piedra blanca es suficiente con 35 lux. mientras que el granito o roca de color se requieren al menos 100-150 lux.

Por otro lado, si el monumento es de gran tamaño, es aconsejable lograr una iluminación de fondo del mismo, con unos niveles mitad de los indicados y haciendo resaltar sus partes más importantes con una iluminación diez veces mayor.